jueves, 17 de noviembre de 2011

Un cuento chino: humor para criaturas solitarias



Por Raúl Ortiz – Mory

Para concretar una historia a partir de lo inverosímil, hay que juntar elementos que engranen como si de un reloj suizo se tratara: todo en su sitio, unido por un objetivo armonioso. Eso es Un cuento chino, la tercera película del argentino Sebastián Borensztein, un ejercicio de rompecabezas con las piezas ordenadas sin dificultad que se aprecia sin pretensiones ni efectismos. La historia parte desde un acontecimiento insólito: en un pueblo de China una vaca cae de un avión sobre un bote donde un hombre está a punto de entregarle un aro de compromiso a su novia, matándola; luego, se traslada a un escenario al otro lado del mundo: una ferretería de Buenos Aires. Estas historias, aunque disímiles, se complementan de manera accidental.

viernes, 11 de noviembre de 2011

El nómada de la no ficción



Por Raúl Ortiz - Mory

Juan Pablo Meneses, el cronista chileno que cuenta todo tipo de historias desde cualquier parte del mundo, afirma que el periodismo narrativo latinoamericano goza de buena salud y que lo mejor está por venir. Temas como la utilización de la primera persona, el estilo y la estructuración del relato y la vocación por ser un periodista de no ficción son algunos de los temas que se abordan en la siguiente entrevista.  

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Amador: la sutileza de los silencios y del humor



Por Raúl Ortiz - Mory

En la mayoría de casos, la industria cinematográfica narra las historias de inmigrantes desde una óptica de sufrimiento y desamparo. No es raro que sea así. Las condiciones en que viven las personas que dejan sus países natales, por un futuro mejor, casi siempre son adversas, y, tanto directores como guionistas, prefieren darle una carga dramática que procure llevar a la reflexión.

Amador, del realizador español Fernando León de Aranoa aborda el tema de los inmigrantes desde una óptica híbrida y convincente: combina el drama con la comedia demostrando que ambos géneros pueden convivir en gracia cuando uno de ellos no pretende ensombrecer al otro. Sin duda, el equilibrio de géneros es una de las claves para que la película del ibérico sea un producto de calidad.   

Bolero desafinado



Por Raúl Ortiz - Mory
  
Muchas veces, cuando una película nacional no cubre las expectativas del público -por no decir que es mala-, solemos rebuscarle aunque sea un punto favorable, algo que le dé valía con la buena intención de justificar, por ejemplo, el esfuerzo de hacer cine en un país en que la cartelera ofrece, mayormente, películas de otras latitudes.Y también hay veces en que las buenas intenciones no bastan.

Paillán y la cosmovisión del cine indígena

Foto: Dieter Castañeda

Por Raúl Ortiz - Mory

El contraste que encierra Jeannette Paillán es atractivo: lleva una trapelacucha, adorno pectoral tradicional que utilizan las mujeres mapuches, algo parecido al accesorio de una princesa nativa, y una tablet de última generación que manipula con entusiasmo desmedido y por la que desliza sus dedos con armonía. Lo ancestral en conjunción con lo modernidad. La inevitable conexión de la comunidad al ciberespacio en tiempos de la globalización más salvaje. Paillán siempre sonríe, hasta cuando enfila su artillería contra los medios que, como dice ella, muestran de manera errónea la realidad indígena seducidos por extraños intereses.