Por Raúl Ortiz - Mory
El boxeo genera apasionamientos y repudios. Algunos sectores de la sociedad lo ven como un acto salvaje entre dos mercenarios que se azotan hasta quedar inconscientes. Nada más lejos de la realidad. El boxeo mezcla la velocidad, la técnica y el amor propio. El debate es amplio y nunca tendrá consenso.
Hablando de cine, el pugilismo es el deporte que más ha llamado la atención de la industria. Distintos realizadores han puesto sus ojos en el Noble Arte por razones muy sencillas: representa una lucha por la vida, una tabla de respeto y la redención misma de vidas derruidas.
Para este artículo se han elegido películas que dejaron huella en la historia del cine, Otras fueron mal recibidas en su momento, pero que con el paso del tiempo se han puesto como el vino. También se han valorado algunos hallazgos que pasaron desapercibidos. Vale decir que no todas las películas tienen al boxeo como asunto central sino que está como marco referencial para ingresar a temas más amplios.